El gobierno neerlandés está estudiando la adquisición de un batallón de tanques tras una década negándose a comprar este tipo de material.

Así lo ha anunciado públicamente el Secretario de Estado de Defensa, Christoph van der Maat.

El Ministerio de Defensa neerlandés está preparando la compra de tanques para la creación de un nuevo batallón.

En 2011, los Países Bajos dieron de baja y vendieron todos los tanques debido a una nueva doctrina militar que no daba cabida a los vehículos blindados pesados. Sin embargo, con el estallido de la guerra ruso-ucraniana, el Ministerio de Defensa del país reconsideró esta decisión.

Durante un debate en la Cámara de Representantes el 28 de junio, Van der Maat admitió que su ministerio tenía previsto adquirir un batallón de tanques Leopard 2 para las fuerzas armadas neerlandesas. También subrayó que se necesitan fondos adicionales para este fin.

Actualmente, la opinión predominante entre los políticos neerlandeses es que los tanques son necesarios para proteger al país de nuevas amenazas.

“En general, la cuestión no es si volveremos a tener tanques, sino cuándo volveremos a tenerlos”, afirma el diputado Pieter Walstar.

Actualmente, Países Bajos no dispone de tanques propios. El Ministerio de Defensa del país arrienda a Alemania una compañía de tanques de 18 Leopard 2A6, pero este número no es significativo.

Fuerzas Acorazadas De Los Países Bajos

Al final de la Guerra Fría, las fuerzas armadas holandesas contaban con 441 tanques Leopard 2A4. Tras el colapso de la Unión Soviética, el país empezó a vender activamente sus grandes reservas de vehículos blindados, ya que la amenaza había desaparecido. En pocos años, los tanques del país se redujeron a la mitad, a doscientos Leopard 2A6NL.

En 2011, los Países Bajos decidieron repentinamente deshacerse del resto de su flota de tanques y vendieron 73 Leopard 2A6NL a Alemania.

Sin embargo, en 2014, tras el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania, el país revisó su política y arrendó 18 carros Leopard 2A6 a Alemania. El contrato de arrendamiento estipula que los tanques pertenecerán a Alemania y servirán a la Bundeswehr, pero serán transferidos inmediatamente a los Países Bajos si así lo solicitan.

La compañía de tanques arrendada forma parte del 414 Batallón Panzer, una unidad germano-holandesa con base en Lohheide, en la Baja Sajonia. Está bajo el mando de la Bundeswehr en el marco de la integración conjunta de los ejércitos de ambos países.