Los artilleros de los ejércitos de ocupación rusos tratan de proteger sus MLRS contra drones.

Dicha información la aporta Militaryi, citando un medio propagandista ruso.

Principalmente los rusos tratan de proteger sus piezas de artillería contra drones-kamikaze y UAVs de pequeño tamaño, que lanzan municiones contra sus piezas.

En sus máquinas instalan carcasas a las cuales sueldan mallas de metal, que deben salvaguardar sus vehículos de combate contra drones-kamikaze y UAVs que lanzan municiones contra ellos.

Los medios del país agresor han publicado un vídeo en el cuál se muestra un MLRS BM 27 URAGAN, cuya cabina y lanzadores están equipados de este modo.

Tal clase de pantallas protectoras se instala a cierta distancia de los tubos de lanzamiento para reducir la probabilidad de impacto o explosión de la munición cargada.

El proceso de creación de tales pantallas protectoras es relativamente simple y barato. Además simplifica el uso de redes de camuflaje.

No obstante, esta clase de protección tiene sus desventajas. En primer lugar aumentan las dimensiones del vehículo, por lo que puede complicar el movimiento causando enganches con líneas eléctricas o puentes.

Construcciones similares son instaladas también en otras pieza de artillería autopropulsada, para evitar ser alcanzadas por los medios de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

Los militares ucranianos también intentan proteger sus sistemas de artillería de las municiones merodeadoras rusas, colocándoles redes y carcasas con mallas.

Sin embargo, hay que señalar que en algunos casos la malla no salva las piezas y máquinas de las municiones merodeadoras.

Las municiones merodeadoras que emplean tanto los invasores rusos, como las Fuerzas de Defensa de Ucrania, pueden atacar no solo desde arriba sino también desde los laterales o la parte posterior del vehículo.