En las regiones de Kursk y Belgorod se ha armado a los combatientes locales de defensa territorial.

El portavoz presidencial ruso, Dmitry Peskov, declaró que el Kremlin confía en el control fiable del suministro de armas a los combatientes de defensa terrorista.

El portavoz presidencial añadió también que armar a esas unidades es una “medida necesaria” ante los “ataques procedentes de Ucrania”.

El 25 de julio, la Duma rusa aprobó una ley que permite a los gobernadores regionales crear sus propios análogos de empresas militares y transferirles armas.

La región de Kursk llevaba varios meses trabajando en la cuestión de proporcionar armas militares a la defensa territorial.

El primer lote ya ha llegado a la base. En un futuro próximo, las autoridades locales planean aumentar el número de armas a 300.

Las unidades formadas en la región también proporcionan “asistencia adicional” al ejército, la Rosguardia, la policía y la guardia fronteriza.

A su vez, la región de Belgorod también ha empezado a armar su defensa territorial local.

“Hemos llegado al punto de resolver la cuestión del suministro de armas para nuestra autodefensa en el marco de la legislación vigente. La situación sigue siendo difícil“, declaró el gobernador regional.

Cabe señalar que los voluntarios de la defensa teritorial de la región recibieron fusiles de asalto, cañones antidrones y coches UAZ. La formación paramilitar consta de unas tres mil personas.

Presumiblemente, tales acciones están relacionadas con el hecho de que a principios de año, el Cuerpo de Voluntarios de Rusia y la Legión de la Libertad de Rusia, que luchan del lado de Ucrania, llevaron a cabo varias incursiones en la región de Belgorod.

La mayor de ellas tuvo lugar a principios de junio, cuando los combatientes de estas milicias antikremlin operaron en la región durante varios días.